Si hay algo que caracteriza a esta ciudad en las últimas décadas, es presentar proyectos megalómanos que rara vez llegan a buen puerto o que vienen a duplicar infraestructuras que ya existen.
La Expo’92 legó a Sevilla un auditorio con capacidad para 8.000 personas, gestionado desde el año 2001 por la empresa sevillana TCM mediante un contrato con el Ayuntamiento. Desde entonces se han realizado numerosos conciertos y eventos de todo tipo, siendo uno de los recintos mas activos de la esfera cultural de la ciudad.
Por ese motivo, el año pasado TCM presentó un proyecto de ampliación y mejora del Auditorio, llamado Palacio de la Música, que duplicaría la capacidad del mismo, pasando de los 8.000 actuales a 16.000 (mil menos que el Palau Sant Jordi, el mas grande de España). Este proyecto incluiría ademas un hotel de 4 estrellas asociado al auditorio, así como un aparcamiento subterráneo en el Canal de los Descubrimientos.
Por otro lado, a principios de 2014, siendo alcalde Juan Ignacio Zoido, el fondo de inversión Orion Capital junto con Octagon, empresa que gestiona recintos como el Wizink Center de Madrid, presentaron un proyecto de palacio multiusos con capacidad para 21.000 personas (4.000 mas que el Palau Sant Jordi) que se complementaría con una zona comercial y de ocio. Este proyecto permitiría a la ciudad entrar en el circuito de las grandes giras de conciertos de estrellas internacionales. El proyecto, ubicado en el Puerto de Sevilla, donde hoy se levantan los depósitos de hidrocarburos de CHL, iniciaba entonces un tortuoso camino burocrático que a día de hoy aun no ha finalizado. Las obras, que debían finalizar en un primer momento en 2015, ni si quiera han empezado aun, a pesar de que tanto el Ayuntamiento como la Autoridad Portuaria realizaron todas las modificaciones urbanísticas necesarias para poder sacar adelante este proyecto.
A dia de hoy, ambos proyectos se encuentran con obstaculos para salir adelante, aunque los promotores siguen mostrando su interes en realizarlos a pesar de estos problemas.
A la crisis que se avecina derivada de la pandemia por la Covid-19 tenemos que añadir problemas burocráticos, administrativos o de competencia. Esto ultimo ha hecho que en el pasado mes de junio, los promotores de Sevilla Park anunciaran que están trabajando en un nuevo proyecto que mantendría solamente el palacio multiusos, eliminando en principio la zona de ocio y comercial tras la apertura del cercano Centro Comercial Lagoh (uno de los mas grandes de Andalucía).
Por su parte, el proyecto de TCM para el Auditorio Rocio Jurado se ha encontrado con el ultimatum del Ayuntamiento de Sevilla para el pago antes de finales de noviembre de la deuda que tiene la empresa con ellos, que asciende a mas de 1’7 millones de euros. En caso de no abonarla, TCM podría perder la explotación del recinto, dando al traste los planes de ampliación proyectados.
La existencia de estos dos proyectos no dejan de mostrar el atractivo de la ciudad para los promotores musicales ya que no existe ningún recinto (ni en uso ni proyectado) de estas características al sur de Madrid, por lo que esperamos que al menos uno de los dos consiga salir adelante. No pensamos que sean necesarios ambos, ya que podríamos encontrarnos con un caso similar al Estadio Olímpico, una gran infraestructura totalmente infrautilizada, aunque al ser proyectos mas reducidos y mejor integrados en la ciudad probablemente no seria complicado sacarlos adelante.