El pasado mes de abril, el estudio Bjarke Ingels Group (BIG) presentó ante la Comisión Europea la que será la nueva sede del Joint Research Center en Sevilla, que se ubicará frente a la actual, en el solar que en su dia ocupó el Pabellón de los Descubrimientos de la Expo’92. Igualmente, será la sede del nuevo Centro Europeo para la Transparencia Algorítmica, tambien de la Comisión Europea. El proyecto de construcción se finalizará despues de este verano de 2023.
El edificio, conocido como «Solar-Cupola» (Cúpula Solar) defiende el compromiso del CCI con la sostenibilidad, aúna la visión europea de la iniciativa New Bauhaus y establece un un nuevo punto de referencia para la colaboración y la co-creación.
El nuevo edificio de 9.900 m2 para la Comisión Europea se integra en el objetivo de la ciudad de Sevilla de convertirse en un referente mundial de sostenibilidad para 2025 y la visión local del proyecto eCity Sevilla para descarbonizar y transicionar la Isla de la Cartuja al 100% de energías renovables.
El edificio albergará 12 unidades de investigación y funciones de apoyo, así como espacios espacios exteriores públicos y privados.
Inspirándose en las sombreadas plazas y calles de Sevilla, BIG propone cubrir todo el emplazamiento del proyecto con una nube de toldos solares que protejan la plaza, el jardín y el edificio de investigación por debajo, a semejanza de las pérgolas típicas de Sevilla. Las marquesinas consisten en placas fotovoltaicas ligeras cuadradas sustentadas por esbeltas columnas. La cubierta cae en cascada
desde el centro hasta una altura a escala humana en su periferia, creando una variedad de espacios públicos debajo.
En el interior, las funciones del nuevo edificio del CCI se organizan con un programa público y servicios como comedores, un centro de conferencias y espacios sociales en la planta baja, mientras que las oficinas y unidades de investigación ocupan las plantas superiores para mayor privacidad y seguridad. Los lugares de co-working dan a la plaza, mientras que los espacios de trabajo más concentrados dan al jardín. La distribución propuesta está diseñada para ser totalmente flexible y adaptable a las necesidades futuras del CCI.
Siguiendo la geometría y modularidad del edificio, dos vacíos diagonales conectan todos los niveles del edificio, fomentando el movimiento físico, así como la interacción social y las reuniones informales.
El edificio está situado en diagonal a lo largo del solar, conectándolo con el Jardín Americano y el centro de negocios y comercial de Torre Sevilla en un espacio público continuo y sin fisuras.
La colocación del edificio en diagonal también crea una nueva plaza pública a un lado del edificio y un jardín privado para la comunidad del JRC en el otro. Las plantas del centro de investigación se retranquean a medida que el edificio asciende, creando una serie de terrazas, espacios sombreados al aire libre para el descanso, la relajación y las reuniones informales con vistas a la ciudad. El diseño pasivo del edificio, gracias a la poca profundidad de su planta y al sombreado constante bajo la pérgola, permite una ventilación cruzada natural y una iluminación ideal, reduciendo el consumo de energía que suele emplearse en iluminación artificial, aire acondicionado y ventilación mecánica.
El diseño da prioridad a los materiales de origen local, como la piedra caliza, la madera y el revestimiento cerámico. La estructura es de hormigón con bajas emisiones de carbono, lo que reduce hasta en un 30% las emisiones típicas de C02, mientras que la pérgola nube es de acero reciclado. Los jardines exteriores, la vegetación de la región y los elementos acuáticos reducen o eliminan el efecto de isla de calor y crean un microclima confortable.
Imagenes y texto: Bjarke Ingels Group (BIG)